Portada » Superación liberadora

Superación liberadora

superacion liberadora © Escuela Liberarte

En una ocasión me contaron la historia de un labriego que se servía de un burro para ayudarle en sus tareas del campo. Con el correr del tiempo, el burro se fue haciendo mayor y su rendimiento comenzó a decaer notablemente.

Una mañana, el labriego se levantó y decidió que era hora de prescindir del burro, pero le tenía demasiado cariño para sacrificarlo sin más, así que se puso de acuerdo con algunos vecinos e idearon un plan para quitarse de en medio al rocín sin que sufrieran demasiado ninguno de ellos.

Lo llevaron en medio de un descampado y excavaron un hoyo de bastante profundidad, de tal manera que no vieran, casi, el fondo del mismo. Arrojaron al burro al hoyo, no sin cierta dificultad. Al verse en aquella situación el animal comenzó a rebuznar y a llorar con infinito desconsuelo comprendiendo, de alguna manera, que el final se acercaba.

El hombre y sus vecinos desconsolados por la reacción del inocente animal, empezaron a tirar tierra dentro del hoyo sin atreverse a mirar por el gran afecto que sentían por el jumento. Con las primeras paletadas, los lamentos del animal arreciaron resonando en los corazones  de los participantes del sacrificio.

Desconsolados, apresuraron el proceso intentando acortar la agonía de todos los presentes y lanzaban sus paletadas tan deprisa como les era posible. A los pocos minutos, los lamentos cesaron repentinamente.

Entendiendo que el animal había alcanzado su final, relajaron la velocidad con la que echaban la tierra aprovechando para recuperar las fuerzas, poco después, cuando creían la tarea terminada, comprobaron con gran asombro como el animal salía del agujero el cual, estaba ya, casi relleno de la tierra extraída y corría feliz por el campo.

Atónitos y, por qué no decirlo, aliviados en cierto modo, comprendieron que el burro, que de tonto no tenía un pelo, con cada paletada, había pisado la tierra y la había compactado para aprovecharla y salir al exterior como un barco aprovecha la marea alta para hacerse de nuevo a la mar de la vida.

Conclusión

Cuando la vida te eche tierra, aprovéchala y conviértete en semilla.

Feliz día.


1 comentario en «Superación liberadora»

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.